Piercings y tatuajes, ¿cómo pueden influir en nuestro día a día?

A diferencia de lo que muchos puedan pensar (y a pesar de que son algo que están bastante de moda), los tatuajes y las perforaciones en la piel son algo que lleva en nuestra especie desde los tiempos de los primeros hombres. Antiguamente muchas grupos étnicos se perforaban y tatuaban la piel con fines culturales o religiosos, creando así una nueva forma de arte denominada a día de hoy ‘body-art’.

No obstante, en las culturas de occidente no siempre está bien visto el hecho de que una persona lleve estos elementos en su piel. De hecho, no son pocos los trabajos que en pleno siglo XXI te exigen no llevar piercings ni tatuajes y, en caso de hacerlo, debes escondértelos con tu vestimenta.
Como habrás podido comprobar, muchos se resisten al cambio, quedando anclados en los prejuicios y en los tópicos más recurrentes, sin embargo hay que tener bien en cuenta que el hecho de que una persona esté completamente tatuada o que lleve piercings en su piel no cambia para nada su talento o cualidades profesionales. Eso sí, por otra parte hay otras muchas personas que consideran atractivas a las personas que los llevan. Pues, como hemos dicho, no son pocos los que valoran estos elementos como una forma de arte. Y tú ¿de qué lado estás?

Tópicos y prejuicios

Como hemos dicho, desgraciadamente vivimos en una sociedad que, en ciertos aspectos, sigue anclada en los prejuicios. Dentro del terreno de los piercings y tatuajes es normal a día de hoy que muchas personas no lo entiendan como una forma de expresión de arte, sino que más bien lo ven como una de las características más definitorias de un maleante. Por ello no son pocas las empresas que no contratan a personas que porten piercings o tatuajes o, de hacerlo, prefieren que estos sean ocultados a la hora de tratar con clientes.
No obstante, hay otras empresas en las que no se trabaja de cara al público que no ponen ningún tipo de impedimento, pues se trata de una cuestión personal en cada uno, y si bien es cierto que una empresa puede tener ciertas normas de vestimenta e higiene (como tener el pelo limpio o la barba bien arreglada), esto no debería afectar pues, en caso contrario, se estaría atentando contra los derechos del propio empleado.

Piercings más utilizados en la actualidad

Todo depende del género de la persona, pues con el paso de los años se han definido ciertos piercings para hombres y otros para mujeres. En el caso de las chicas los más comunes son en la lengua, en el ombligo, en la zona céntrica inferior del labio, en los pezones, el septum o en la nariz. Estos dos últimos también son los más utilizados por los chicos, además de en las orejas o en la ceja, que siguen siendo bastante comunes.

Por otro lado tenemos las famosas dilataciones que están tan de moda. Sin embargo hay que penarse más el hecho de realizárselas, pues con con el paso del tiempo deformarán la zona de nuestro cuerpo en la que estén y sus efectos serán totalmente permanentes.

¿Son más sexis las personas que los llevan?

Si hablamos de piercings y tatuajes dentro del terreno de la sexualidad debemos reconocer que no son pocas las personas que consideran estos elementos como algo realmente atrayente. Los piercings en los genitales pueden aumentar no sólo la excitación de la pareja durante las relaciones sexuales, sino también la estimulación en dichas zonas erógenas.
Respecto a los tatuajes no son pocas las mujeres que consideran sexys a los hombres que los llevan . De hecho, un estudio realizado por dos universidades polacas han revelado que el aumento sexual de las chicas aumenta frente a lo hombres tatuados. Algo que sin duda también ocurre cuando son las mujeres quienes los llevan.

Entonces ¿podría considerarse que las personas que llevan piercings y tatuajes son más sexys? A estas alturas lo lógico es pensar que cada persona es un mundo y tendrá sus propios gustos y prioridades. Sin embargo no son pocos los que se sienten más atraídos por las personas que sí que los llevan, pues a sus ojos estos se convierten en sujetos totalmente irresistibles.